Me pregunto si eres esa extraña voz dentro de mí
o el eco de mis palabras estrellándose en el agua,
supongo que algo de los dos, las dos cosas juntas
o ninguna de ellas; pero algo más cruzó por mi mente
si tú eres el eco o el pretexto para mí,
podrías entonces decirme que soy yo para ti,
pensaba en muchas opciones, escogí, que,
quizás sea un dulce recuerdo olvidado,
la imagen de un corazón borroso,
un lindo sueño despierto
o talvez la oportunidad de volar muy lejos,
la respuesta la conoces tú.
Más imagino que de alguna forma
ésta historia nos ayuda de distintas maneras
a ambos, dirías entonces que somos dos almas solitarias
que se encuentran en la aurora para recrear su soledad,
y vestirse de silencio para bailar en el ensueño celeste
de un hermoso cuento, dos almas que se hacen compañía
sin esperar , dos almas que en el mismo momento que
encuentren la voz perfecta que diga sus nombres
se hagan una sola para subir al firmamento
y brillar por siempre quedando grabado
el sueño en la mente o solo en el inconsciente.